El director general de Residuos y Educación Ambiental, Sebastià Sansó, ha visitado, este viernes, el centro de preparación para la reutilización de la fundación Deixalles en Inca. En este espacio se está llevando a cabo el proyecto «Análisis de la viabilidad social, ambiental y económica de la preparación para la reutilización de pequeños Residuos de Aparatos Eléctricos y Electrónicos (RAEE)», financiado con 73.763, 72€ de las subvenciones para impulsar la economía social y circular.
El objetivo del proyecto es recoger 38 toneladas de RAAE de la fracción de aparatos pequeños para reutilizarlos, así como calcular el porcentaje de esta tipología que no se reparan por motivos económicos y aumentar la tasa de reutilizados.
Sansó se ha mostrado muy satisfecho de que Deixalles siga con la línea de la reutilización, «uno de los pilares de la Ley de residuos y que hará que, en una fracción como la de los aparatos pequeños, se pueda llegar a que el 65% de lo que se considera residuo se repare y vuelva al ciclo de la economía circular».
Reparación y reutilización de pequeños aparatos electrónicos
Además de este proyecto, Deixalles pondrá en marcha un espacio de autoreparación de residuos para dar herramientas a la ciudadanía para que adquiera los hábitos y tenga la información que permitan la reducción de su huella ecológica a través de la reparación y la reutilización.
La puesta en funcionamiento de este espacio ha sido subvencionada con 26.552,13 euros y tiene como objetivo que el 80% de los residuos vuelvan a poderse utilizar después de la reparación. Entre las actuaciones previstas se encuentra la creación de un centro de prevención de residuos en Manacor, talleres de reparación y un sistema de préstamo de herramientas para pequeñas reparaciones.