El Servicio de Protección de Especies ha coordinado la cesión de quince milanas nacidas en Mallorca al Parque Natural de Sierra de Cazorla, Segura y las Villas en el marco de un proyecto de reintroducción y refuerzo poblacional de la especie en Andalucía. De este modo, la Conselleria de Medi Ambient i Territori mantiene el compromiso con este proyecto por tercer año consecutivo. Desde el inicio de esta colaboración, que se mantendrá al menos dos años más, las Illes Balears han aportado una treintena de pollos al proyecto.
La extracción segura de los ejemplares ha sido posible gracias a la colaboración entre diferentes entidades y organismos. Durante los últimos meses, los Agentes de Medio Ambiente han llevado a cabo el seguimiento de la población reproductora de milana (Milvus milvus) en Mallorca con la localización de nidos y seguimiento de estos, determinando el éxito reproductor y el número de pollos. De estos nidos se han seleccionado los más accesibles y el Grupo de Intervención en Altura (GIA) de los Agentes de Medio Ambiente se ha encargado de extraerlos.
El GOB, con el apoyo de Endesa, de Enel-Green Power y de la ONG AMUS, ha anillado el resto de pollos que quedaban en los nidos (14), con anillas y marcas alares de lectura a distancia, y 11 de estos pollos han sido equipados con emisores de seguimiento por satélite. Esto permitirá hacer el seguimiento de estos individuos y obtener información del uso que hacen del territorio, así como detectar casos de mortalidad de ejemplares provocados por uso de veneno, dispares ilegales o electrocuciones.
El Consorcio para la Recuperación de la Fauna de las Illes Balears (COFIB) ha apoyado a las tareas de marcaje y ha trasladado los pollos hasta sus instalaciones de Santa Eugènia donde, además de hacerles el seguimiento veterinario oportuno, se los ha alimentado y mantenido entre 5 y 10 días hasta el día de su traslado hacia la península, donde se llevará a cabo su liberación.
Finalmente, el Grupo de Rehabilitación de la Fauna Autóctona y su Hábitat (GREFA) entidad encargada de llevar a cabo el proyecto de reintroducción de la Junta de Andalucía, ha recogido los 15 pollos para su traslado a la península y llevar a cabo el hacking en la Sierra de Cazorla. Esta técnica consiste en mantener los ejemplares cerrados en unos nidos o plataformas artificiales hasta que se acostumbren a su entorno y puedan ser liberados. Los ejemplares se marcarán en el lugar de liberación con anillas y marcas alares y emisores de seguimiento vía GPS.
El proyecto de reforzamiento poblacional ya ha conseguido que dos parejas se reproduzcan en territorio andaluz y ha acumulado información valiosa sobre los movimientos de los ejemplares liberados a través de los continentes europeo y africano. Los próximos objetivos a lograr son la creación de más parejas reproductoras y la conexión con territorios donde la especie ya está consolidada como, por ejemplo, el Parque Nacional de Doñana y territorios de Castilla-La Mancha y Extremadura.