El documental «Signes a l’arena: Mallorca 1983», dirigido por Pinxo y Cesc Mulet, captura el espíritu de la Movida y la explosión creativa que vivió la isla durante los primeros años de la democracia, con testimonios y música de los protagonistas de aquella época.
En 1983, Mallorca se sumó a la ola de cambios sociales y culturales que sacudía a toda España. Con el auge de la Movida madrileña como telón de fondo, la isla experimentó su propia revolución artística y musical. El documental «Signes a l’arena: Mallorca 1983», dirigido por Juan Antonio Forés, conocido como Pinxo, y Cesc Mulet, ofrece una ventana a esos años, cuando el ansia de libertad y la creatividad de una generación transformaron la vida cultural de Mallorca.
La película, de 68 minutos de duración y en catalán, es un retrato de la efervescencia cultural que vivió la isla en los primeros años de la democracia, con el concurso pop-rock de 1983 como punto de partida. A través de conversaciones relajadas, anécdotas y recuerdos de los protagonistas, los directores nos llevan de vuelta a una Mallorca que hervía de energía creativa y donde surgieron bandas como Furnish Time, Peor Imposible, Zincpiritione y La Granja, que marcarían una época.
Una mirada a la juventud de los 80 en la isla
El documental huye de las entrevistas formales para ofrecer un enfoque más íntimo y espontáneo. Los músicos y artistas de la época, reunidos en un ambiente distendido, comparten recuerdos alrededor de una mesa, entre cervezas y risas, mientras suena la música de fondo de Els Resplendents Escorpins Platejats, una banda formada por músicos locales que interpreta temas de Pere Plà, otro icono de la escena mallorquina de los 80.
Pinxo y Mulet logran capturar no solo la esencia de la Movida en Mallorca, sino también el contexto sociopolítico que vivió la isla en ese momento. Con la muerte de Franco y la llegada de los primeros ayuntamientos democráticos, la juventud mallorquina, como la del resto del país, se lanzó a explorar su libertad recién conquistada. Este ambiente de experimentación y creatividad sin límites llevó a la creación de una escena cultural única, donde el pop, el rock y el arte rompieron moldes y fronteras.
Testimonios de figuras clave
Además de los artistas locales, el documental cuenta con la participación de grandes nombres de la Movida nacional como Miguel Ríos, Ana Curra, Jesús Ordovás y Luis Auserón, quienes aportan sus propias anécdotas sobre las veces que visitaron la isla y vivieron de cerca su bulliciosa escena cultural. Las imágenes de archivo, recopiladas en colaboración con la asociación cultural MallorcaNochentas, se mezclan con material inédito para ofrecer una visión completa de aquella época dorada.
El documental también rinde homenaje a figuras clave de la escena mallorquina que ya no están, como Pere Plà y Marta Sierra, cuyo legado sigue vivo en las generaciones que vivieron aquellos años. Con un enfoque nostálgico pero fresco, «Signes a l’arena» se convierte en un viaje personal y colectivo hacia una época de luces y sombras, en la que la juventud de Mallorca redefinió el panorama cultural de la isla.
Una producción local con proyección internacional
Producido por La Perifèrica Produccions y MallorcaNochentas, en coproducción con IB3 y con el apoyo del ICIB y el Consell de Mallorca, el documental ha contado con un equipo técnico de primer nivel, con la participación de Núria Cano en la producción, Jaume Caldentey en la dirección de fotografía y Xesca Rebassa en la edición y motion graphics. La narración corre a cargo de Clara Ingold, cuya voz guía al espectador a través de los diferentes episodios de esta historia cultural.
Con una selección musical curada por Pinxo, que incluye a bandas emblemáticas de la época como Furnish Time, Peor Imposible y Zincpiritione, la película no solo es un documento histórico, sino también una celebración de la música y la creatividad de los años 80 en Mallorca. «Signes a l’arena» es, en definitiva, un homenaje a una generación que rompió con las convenciones y dejó una huella imborrable en la cultura de la isla.