El alcalde de Palma, Jose Hila, junto con la concejala de Infraestructuras y Accesibilidad, Angélica Pastor y el coordinador general del área, Luis Sureda, han visitado hoy las obras del parque de Sa Riera que empezaron a finales de septiembre y que previsiblemente estarán terminadas a principios de la primavera de 2021.
Durante estas primeras semanas se ha trabajado en el cierre de la zona y en la cimentación de la estructura de este nuevo parque, se ha cimentado la estructura que aportará sombra y se están realizando las tareas de cimentación de los muros que conforman los itinerarios. Asimismo se han trasplantado los árboles afectados y se han sembrado en zonas cercanas al parque.
El alcalde, Jose Hila, ha explicado que este espacio para niños y niñas tiene una concepción diferente. «Es un espacio para niños y niñas será el primer parque 100% accesible de la ciudad tendrá además plantas, sombra, una fuente y será un descubrimiento el parque para todos«, dijo y recordó que Palma es una ciudad amiga de la infancia. «En tiempos de pandemia no paramos. Esta es una de las obras con los 70 millones de euros de inversión que tenemos para obras municipales«, explicó.
Pastor, por su parte, explicó que es un concepto de parque diferentes a los que tiene Palma. «Queríamos innovar y aplicar la ley de accesibilidad universal; desde la Mesa de Accesibilidad queremos parques para todos, trabajamos también el concepto de sombra y cuando llega la época de calor se reclaman y además es una zona de estancia con lugar para merendar, una fuente y pensada desde la sostenibilidad y la accesibilidad«, explicó.
El nuevo parque de Sa Riera, que supone una inversión de 611.852,22 euros y contribuye a generar 16 puestos de trabajo, está ejecutada por la empresa ACSA Obras e Infraestructuras. Con esta intervención el parque de Sa Riera se transformará en el primer parque inclusivo y sensorial completo de la ciudad y ocupará el espacio que quedó dañado por un incendio el pasado mes de julio de 2019.
El objetivo es que este nuevo parque simule las sensaciones que se experimentan en el bosque de Bellver y crear el primer parque de Palma que da respuesta a la accesibilidad universal.
Además, desde la Oficina de Accesibilidad se ha trabajado para que este proyecto transforme este espacio en un lugar orgánico con una zona de juegos cubierta por una estructura textil que proporciona sombra a los juegos infantiles. El área de Infraestructuras había detectado peticiones ciudadanas, planteando que los parques faltaba sombra. Así se crea un lugar de reunión con una fuente y bancos que hasta el momento no existía y que está pensado también para poder estar en las épocas de verano. El proyecto entiende la ciudad desde una perspectiva más amable, más sostenible y más accesible y crea itinerarios sensoriales que atenderá las diferentes discapacidades (física o motora, sensorial, auditiva, visual, intelectual y psíquica).
El espacio que anteriormente ocupaba la torre quedará ocupado por dunas de diferentes alturas recubiertas con hierba artificial donde los niños podrán desarrollar sus actividades libremente. Se colocarán elementos de sujeción como cuerdas o trueques que permitirán la escalada a todos los puntos de las dunas y tubos circulares que atraviesan las dunas.