Baleares ha conmemorado el 180º aniversario de la creación de la Guardia Civil española. Esta institución, fundada en 1844, ha sido durante casi dos siglos un pilar fundamental en la protección y servicio a la sociedad española.
La Guardia Civil fue oficialmente creada el 28 de marzo de 1844 por Real Decreto, con el propósito de constituir un «cuerpo especial de fuerza armada de Infantería y Caballería» bajo la dependencia del Ministerio de la Gobernación. Esta nueva fuerza se encomendó al mariscal de campo D. Francisco Javier Girón y Ezpeleta, II Duque de Ahumada, quien asumió el desafío de estructurar una institución que, en palabras del propio decreto, tenía como misión «proteger eficazmente las personas y las propiedades».
Foto de Tony Carbonell
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El Duque de Ahumada propuso una organización basada en la calidad y la selección rigurosa del personal. En su informe del 20 de abril de 1844, abogó por cambios organizativos y una remuneración adecuada para los guardias, garantizando así la excelencia y eficiencia del servicio. Este informe llevó a la promulgación del definitivo Real Decreto de 13 de mayo de 1844, presentado por el Presidente de Gobierno y Ministro de la Guerra, D. Ramón María Narváez, estableciendo las bases fundacionales de la Guardia Civil.
Estructura y organización
El término «guardia» proviene del gótico wardja, que significa vigilar, y «civil» del latín civilis, ciudadano. Los antecedentes históricos de la Guardia Civil se encuentran en instituciones como la Santa Hermandad de Toledo del siglo XIII y otras similares en Cataluña, Aragón, y Valencia.
Fotos de Tony Carbonell
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La organización inicial de la Guardia Civil dependía del Ministerio de la Guerra para su estructura y disciplina, y del Ministerio de la Gobernación para su servicio. La fuerza original se componía de 14 jefes, 232 oficiales y 5769 guardias, distribuidos en 14 Tercios, unidades que evocaban la tradición militar española de la época de los Austrias.
En el verano de 1844, comenzó el reclutamiento de los primeros aspirantes. El proceso de selección fue riguroso, complementado con una formación exigente en instalaciones militares de Madrid. En un discurso enérgico dirigido a los futuros oficiales, el Duque de Ahumada enfatizó las obligaciones y sacrificios inherentes al servicio, dejando en segundo plano las retribuciones.
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El 1 de septiembre de 1844, se celebró la presentación oficial de la Guardia Civil con una parada militar en la que participaron mil ochocientos setenta guardias, luciendo el distintivo tricornio, símbolo que se convertiría en representativo de la institución y de España.
El 9 de octubre de 1844, se aprobó el Reglamento para el Servicio de la Guardia Civil, que establecía las obligaciones, facultades y la dependencia orgánica del cuerpo. El Reglamento Militar de la Guardia Civil, aprobado el 15 de octubre, delineó la organización y disciplina del personal.
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La cartilla del Guardia Civil
El 20 de diciembre de 1845, el Duque de Ahumada creó la «Cartilla del Guardia Civil», documento que constituiría el código moral de la institución. Este código deontológico establece la doctrina del Cuerpo, enfatizando el honor, la honradez y la seriedad en el servicio. La famosa frase «el honor es la principal divisa del guardia civil; debe, por consiguiente, conservarlo sin mancha. Una vez perdido, no se recobra jamás» resume la filosofía de servicio de la Guardia Civil.
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Primeros servicios y evolución
El 10 de octubre de 1844, la Guardia Civil realizó su primer servicio oficial durante la constitución de las Cortes Generales, asegurando la comitiva de la reina Isabel II. Desde entonces, la Guardia Civil ha evolucionado y adaptado a los cambios sociales y políticos, manteniendo siempre su compromiso con la protección del orden público, la seguridad de las personas y la propiedad, y la ejecución de las leyes.
A lo largo de sus 180 años de historia, la Guardia Civil ha demostrado ser una institución resiliente, comprometida y esencial para la sociedad española. En este aniversario, celebramos no solo su fundación, sino también el legado de servicio y honor que continúa guiando a sus miembros.