En este estado de confinamiento es difícil descubrir cuáles son las nuevas prioridades, pasiones, condiciones, alegaciones que nos hagan acertar este paradigma que nos ha tocado vivir, de una forma aislada, mirando indiscrétamente si algún vecino limpia los cristales o se suena o lleva mal puesto el vestido. Sentir o dejar sentir, esa es la cuestión. Ahora que a través de los televisores tenemos todo el tiempo del mundo para recibir información de cualquier tipo sobre el maldito COVID-19 nos sentimos chiquititos, a pesar del heroísmo de los Sanitarios, Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, de los Trabajadores y Trabajadoras que siguen al pie del cañón, de nuestro propio heroísmo, de la crianza, del teletrabajo, bendito teletrabajo. Algunos hemos descubierto para qué sirve cada tipo de trapo o bayeta, que no hace falta limpiacristales para limpiar las ventanas y qué precioso tiempo estamos aprovechando con nuestros hijos. A pesar de toda esta crisis que viene siempre queda tu paisano, conciudadano, vecino, amigo. Unidos, como este momento musical a las 20:00 que se cierra con aplausos que ya son para todos nosotros, nosotros somos el aplauso, la fuerza constante que va a reventar esta rutina de encierro dulce.
En este lugar de solidaridad y empatía encontramos un balcón musical, el de Manu C, un DJ profesional convertido en bálsamo de esta barriada de Palma que confluye entre las calles BIsbe Maura, Vinyassa y Margarita Caimari. Cada día a las 19:45 enciende sus altavoces y empieza una sesión de puro amor confinado, que hace las delicias de todos los vecinos. Manuel Contreras nación en Mahón hace 37 años, desde muy joven supo que la música se convertiría en algo más que pura diversión. Esa pasión la pudo canalizar ejerciendo de DJ residente en varias salas menorquinas, además de estar radiando en emisoras locales. En un momento dado decidió ampliar su abanico vital y dar el salto a Mallorca donde gracias a su constancia y exquisito trabajo consiguió compartir cabina con otros grandes DJs de música electrónica y pinchar en los mejores locales de la noche mallorquina. Desde hace un tiempo decidió montar su propia empresa de eventos, DIVERTITY DJ’S que está enfocada a todo tipo de celebraciones como bodas,
bautizos, cumpleaños, comuniones y fiestas privadas.
ENTREVISTA
¿Cómo surgió ponerte a los mandos de tu balcón musical?
Salimos el primer día a aplaudir tal como dijeron a las 20 horas. Al día siguiente con mi hijo mayor antes de los aplausos pusimos una canción con el altavoz pequeño y un par de vecinos se asomaron con su linterna del móvil. Al ver que respondían al día siguiente pusimos dos canciones y vimos que la gente se animaba. Entonces sacamos el equipo, cogí el micro y me presenté a todos los vecinos. Desde entonces todos nos esperan. A las ocho menos cuarto bailamos dos canciones, hacemos el homenaje y seguimos con el ritmo hasta las ocho y cuarto. Disfrutamos todos esta media horita al día desconectando y pasando un buen rato todos juntos.
¿Cómo han reaccionado los vecinos?
Desde el primer día nos han apoyado y nos han acogido con gran ilusión y amabilidad todo el vecindario, agradeciéndonos nuestra pequeña aportación diaria.
Este momento de reunión vecinal es esperado por muchos, ¿Os coordináis las coreografías, la vestimenta, las sugerencias musicales?
Sí, hace un par de semanas nos dimos los teléfonos para crear un grupo de WhatsApp, en el cual se fueron agregando cada día más vecinos y en el que cada uno va aportando ideas para salir al balcón, tanto de vestimenta como las canciones que quieren escuchar. Somos una gran comunidad.
Has recibido multitud de muestras de apoyo, ¡¡menuda responsabilidad!!
Sí, pero lo hago con toda las ganas e ilusión del mundo, disfruto viendo a la gente disfrutar y desconectar con este pequeño y a la vez tan gran gesto.
¿Conoces a alguien que esté sufriendo la enfermedad del covid-19? ¿Te comunicas con ellos?
Por desgracia sí, mi suegra fue ingresada hace una semana y gracias a Dios todo va favorable. Aunque cuando te dan la noticia es como un jarro de agua fría porque crees que nunca te va a pasar o dar este tipo de noticia. Estas semanas nos podíamos quejar de estar en casa encerrados y aburridos, pero no nos damos cuenta de la suerte que tenemos estando juntos y sabiendo que toda la familia y amigos están sanos, es en ese momento en que de verdad valoras la salud. Con ella nos comunicamos por WhatsApp y videollamadas.
¿Qué mensajes quieres lanzar a los Palmesanos?
Que respeten las normas de confinamiento que la cosa es más seria de lo que nos pensamos. Si vamos todos a una, conseguiremos acabar antes con este virus tan maléfico. Mucha fuerza y ánimo que nosotros podemos.
¿Te ha afectado laboralmente el estado de alarma? ¿Qué proyectos tenías planeados actualmente?
Totalmente, me despidieron de mi trabajo en el aeropuerto, pues soy conductor de autocar. A parte tengo mi empresa de eventos DIVERTITY DJ’S, en la cual ofrezco mis servicios como dj para todo tipo de celebraciones, causando un parón del 95% en la entrada de solicitudes y aplazando más de 8 eventos que ya teníamos contratados para estos meses.
¿Estáis preparando la fiesta de fin de confinamiento?
Con muchas ganas e ilusión estamos todos deseando que esto termine para poder celebrarlo todos juntos y poder conocernos en una comida o cena aquí en la barriada. Tenemos pensado solicitar al Ayuntamiento un permiso para poder llevarlo a cabo en alguna de nuestras calles. Os aseguro que no faltará de nada, comida, bebida, música, buen ambiente y sobre todo mucha alegría de poder juntarnos y volver a nuestra rutina. Esto nos ha servido para unirnos entre vecinos y esperamos que no caiga en saco roto.
Imágenes de vídeo: Carlos Hellín (RECBLAU AUDIOVISUALES) y Tony Carbonell (La Palmesana)
Fotos: Carlos Hellín y Tony Carbonell