En el Parque Natural de Sa Dragonera se están realizando tres estudios diferentes sobre la pardela balear, más conocida como virot petit (Puffinus mauritanicus), un ave catalogada en peligro de extinción.
Por un lado, el Grupo de Ecología y Demografía Animal del IMEDEA (CSIC-UIB), está llevando a cabo una campaña de seguimiento de la reproducción del virot petit en coordinación con la Universidad de Oxford. Hoy en día se conocen unos 30-40 nidos en la isla, pero estiman que es posible que haya más.
Por otra parte, la Iniciativa de Investigación de la Biodiversidad de las Islas (IRBI), tiene el objetivo de detectar zonas nuevas de nidificación, mediante la localización de parcelas nuevas de nidificación en zonas de difícil acceso, tanto en la cara norte (acantilados) como en la sur. Este proyecto incluye la instalación de cámaras de visión nocturna.
Los equipos de investigación de la Universidad de Oxford se están encargando de mirar aspectos complementarios de la ecología de la especie del virot petit, como por ejemplo: el comportamiento en el mar, las áreas donde pescan o cuando buscan comida.
Aurora Ribot, vicepresidenta del Consell de Mallorca y consejera de Sostenibilidad y Medio Ambiente, ha destacado que «el virot petit es un símbolo a proteger y, por eso, en el Parque Natural de Sa Dragonera se continuará estudiando esta especie en peligro de extinción y continuaremos apoyando iniciativas científicas que estén interesadas en realizar estudios para una mejor conservación y protección de la biodiversidad del parque».
Por su parte, Inmaculada Férriz, directora insular de Medio Ambiente, ha destacado que «como ave endémica del Mediterráneo y la más amenazada de Europa, para nuestra dirección insular es muy importante que se haga seguimiento del estado de la población y el éxito reproductor del viro pequeño, para poder conocer su evolución y trabajar en la reducción o eliminación de impactos negativos».
Gracias a la financiación del Consell de Mallorca, redobla esfuerzos y coordina diferentes estudios para obtener información que tanto el IMEDEA como el IRBI están realizando estudios para obtener más información sobre esta ave en peligro de extinción. Los diferentes grupos científicos, ya mencionados, colaboran entre todos para recoger toda la información posible sobre esta especie y poder entender mejor su presencia en el parque natural de sa Dragonera.
Los estudios corroboran que el viro pequeño tiene una mortalidad elevada por culpa de las artes de pesca como el palangre así como también los depredadores de sus nidos (como pueden ser las ratas). Los científicos del IMEDEA destacan que entre las amenazas a las que se enfrenta el virot petit, la ingesta involuntaria de plástico es una de las más preocupantes. Muchas de las aves que se han encontrado muertas tienen restos de plásticos en el estómago.
En cuanto a la tarea de localizar nuevas áreas de nidificación, tanto en los islotes del Pantaleu y sa Mitjana como en la isla de sa Dragonera, la Iniciativa de Investigación de la Biodiversidad de las Islas (IRBI) explica que ya han localizado una zona nueva de cría y que se seguirá trabajando en las prospecciones.