El Instituto de Investigación y Formación Agroalimentaria y Pesquera de las Illes Balears (IRFAP), de la consellería de Agricultura, Pesca y Alimentación, da un paso más en la información sobre la leche que aporta a los ganaderos de vacuno. Este instituto gestiona desde hace años el control oficial del rendimiento lechero en las explotaciones de vacuno de leche de las Illes Balears, que es la principal fuente de datos para trabajar la mejora genética.
El control del rendimiento lechero se define como el conjunto de actuaciones que fundamenta la evaluación genética de los reproductores vacunos de aptitud lechera para mejorar las producciones lácteas. También proporciona información sobre la cantidad y calidad de la leche, y otros parámetros importantes para la gestión de las explotaciones ganaderas, como son los recuentos individuales de células somáticas.
Explotaciones ganaderas
En las Illes Balears hay inscritas 123 explotaciones de vacuno lechero, con unas 11.000 cabezas totales de ganado vacuno lechero. A partir del mes de abril, en las analíticas de la leche provenientes del control lechero, constarán dos nuevos parámetros: los neutrófilos y el beta hidroxi butirato (BHB).
Correlacionando el resultado del recuento de células somáticas con el de los neutrófilos, las explotaciones ganaderas podrán determinar qué animales están en situación de alerta y son susceptibles de acabar infectados de mastitis. También podrán determinar problemas de cetosis subclínica gracias a la determinación del BHB, que les permitirá estudiar la prevalencia de los animales con más de 0,1 mmol/L a la leche en los 60 primeros días de lactación, y así modelizar la magnitud del problema en sus explotaciones.
Los datos recopilados entre los años 2016 y 2020 se expusieron a los ganaderos y ganaderas en una jornada celebrada en Campos y una en Ferreries el pasado mes de marzo.