En junio de 2016, la Comandancia General de Baleares presentó su Plan Vigilante Balear a los medios de comunicación. Este plan consistía en la vigilancia, por parte de tropas del Ejército de Tierra, de lugares sensibles de la Isla donde pudieran producirse incendios, aprovechando las actividades habituales que se vienen realizando por las unidades y con la idea de ampliar su radio de actuación en colaboración con las instituciones civiles para mejorar y preservar el medio ambiente. Era un plan diseñado para llevarse a cabo entre los meses de mayo y octubre y centrado en la prevención de incendios y protección del medio ambiente.
La integración en el Mando de Canarias, así como la participación de la COMGEBAL en el esfuerzo de las misiones asignadas al ET, supone una modificación en el enfoque y aproximación del estudio y empleo de las capacidades de la Comandancia en lo referente al apoyo a Autoridades Civiles, añadiendo a la participación en la protección del medio ambiente y mantenimiento de instalaciones, las de presencia en todas las islas del archipiélago balear, más si cabe teniendo en cuenta que se encuentra bajo la influencia de los flujos migratorios de naturaleza irregular aprovechando su relativa proximidad a los países del sur de la cuenca del mediterráneo. Así, el plan integra las relaciones institucionales, el conocimiento del entorno, la presencia y vigilancia en los espacios de soberanía, la contribución a la protección civil y seguridad ciudadana.
La ejecución del plan, se lleva a cabo, por un lado, mediante la participación en actividades de carácter institucional, por otro lado, con marchas a pie y motorizadas, ejercicios de liderazgo de entidad sección y destacamentos permanentes o periódicos en determinadas instalaciones militares y por último y en su caso, con el planeamiento operativo
Con esta nueva orientación el Plan Vigilante Balear pasa a ser un plan permanente de la COMGEBAL, estando activo todo el año.