Con la educación, con las cooperativas, con las oenegés o con una simple colaboración podemos arrancar ese gen egoísta que hace del ser humano un animal maravilloso. Aprender, desaprender o convertirse a otra religión, concepto, ideología, no importa el qué, ni con quién. Lo más importante es aportar ese granito de arena que se convierte en montañas de solidaridad y simpatía.
En estos tiempos de confinamiento es posible seguir haciendo girar la máquina de la empatía. Y es así como María Martín, comunicadora y experta en marketing digital y producción de eventos empatizó con su amiga médico y su desazón con el aumento de contagios por COVID.-19 entre el personal sanitario. María y Sonia empezaron a coordinar una red de voluntarios que confeccionan batas con bolsas de basura, otros que las donan y de esa forma paliar, en la medida de lo posible , las carencias que hay en este momento de desconcierto.
¿Cómo nace el colectivo #NoSinMiEPImallorca?
Es un proyecto piloto. Una amiga médico del SUAP (Servicio de Urgencias de Atención Primaria) se puso en contacto conmigo, muy preocupada por la situación. El contagio de COVID-19 entre el personal sanitario no paraba de aumentar y prácticamente no contaban con EPIs (Equipos de protección individual). Ella con la ayuda de una modista había elaborado un patrón para confeccionar batas fabricadas a partir de bolsas de basura que podían protegerles en las visitas y urgencias a domicilio. Hacía falta coordinarlo, ahí entré yo. Mientras que Sonia, otra compañera precursora de #NoSinMiEPIMallorca se encargaría de las recogidas y entregas de material y batas.
Sonia recibiendo bolsas de un donante de material
¿Cuál ha sido el método de comunicación con los donantes de material?Principalmente a través de teléfono. Me puse en contacto con empresas y entidades que podían tener el material que necesitábamos: bolsas de basura de jardín de 100L. Y las donaciones de particulares a través de redes sociales. Canalizamos la comunicación en mis perfiles profesionales (MARTNworks) y abrimos el hashtag #NoSinMiEPImallorca para darle difusión. La respuesta de la gente fue casi inmediata; en 48h teníamos las máquinas de coser en marcha!.
¿Habéis recibido muchas donaciones?
¡La verdad es que sí!. Costó un poco al principio, porque lo que más nos ayudaba eran donaciones «en cantidad» y esto solo lo podían proporcionar empresas. Los particulares, que han sido el auténtico motor, colaboran con los rollos de bolsas que encuentran en el supermercado cuando van a hacer sus compras de casa y el volumen aunque constante era pequeño. Se fabricaban batas a más velocidad de la que entraba material y eso nos hacía perder ritmo. Conseguimos darle la vuelta gracias a Puro Beach Illetas, Café a Tres Bandas, EMAYA que ha donado 600 bolsas y Fundación Hadas que hizo una aportación económica (la única que aceptamos) para gasolina y material. ¡Estamos muy agradecidas!.
¿De qué forma se puede colaborar?Por un lado con donaciones de material, y por otro confeccionando las batas. Esto lo hacen [email protected] que tienen máquina de coser en casa.
¿Cómo coordináis la recogida de material?[email protected] donantes se ponen en contacto a través de instagram o whatsapp. Recogemos los datos, posteriormente elaboro una hoja de ruta y procedemos a la recogida en los domicilios. Desde el principio hemos coordinado esta cadena solidaria de manera que nadie en ningún caso tenga que salir de casa para poder colaborar.
¿Cómo es la acogida entre los sanitarios cuando reciben las batas?
¡Brutal!. Están muy agradecidos y emocionados.
¿Tenéis pensado elaborar otro elemento que pueda servir de ayuda?Estamos a punto de llegar al objetivo, con la recogida de batas que nos falta por hacer habremos pasado de largo las 1000 batas. Y haremos un parón. Está siendo una experiencia preciosa y muy intensa a la vez. Tenemos nuestras propias historias profesionales y personales. Necesitamos un descanso. ¡En muy pocos días podremos decir que el equipo de #NoSinMiEPImallorca lo ha conseguido!.
María Martín
¿Qué medidas de seguridad tienen que tomar los artesanos?Lo primero que le facilitamos a las personas que van a fabricar batas desde sus casas son las medidas de higiene y seguridad. No se pueden hacer en caso de presentar síntomas (cualquier persona que esté en la casa), fiebre, estornudos, malestar… Hay que preparar la zona de trabajo limpiando bien con agua y lejía. Utilizar mascarilla o pañuelo protector y lavarse las manos antes de ponerse manos a la obra, y entre bata y bata. Somos muy insistentes con esto.
El hecho de ser Comunicadora te habrá permitido coordinar mejor los grupos de trabajo…
Cierto. Por mi trayectoria profesional tengo mucha experiencia en coordinar equipos de trabajo, y eso hace que me salga solo, ¡es como automático!. En este caso además, por el momento y el tipo de proyecto, la gente me ha ayudado mucho y han tenido mucha paciencia con mis tiempos de respuesta.
¿Qué proyectos tenías planeados para estos días antes del estado de alarma?Acababa de empezar con mi proyecto profesional «en solitario», MARTN Works. Tenía dos meses de vida antes de que estallara la crisis COVID-19. Tenía en marcha 4 campañas de promoción de conciertos, estaba gestionando las redes sociales del Mercado Gastronómico San Juan, trabajando en la imagen corporativa de un nuevo proyecto de flamenco en Mallorca, desarrollando la estrategia de marketing de una empresa de tratamiento de aguas y sostenibilidad… todo se ha parado. Los primeros días de confinamiento pensé en ponerme a trabajar con mi propia imagen y definir mejor mi propio proyecto, además de darle un empujón al Máster de marketing y comercio digital que estoy haciendo. Seguramente también me propuse hacer yoga y arreglar los armarios, pero a estas alturas de la entrevista ya sabes lo que pasó en realidad… 😉
¿Puedes conciliar la vida laboral y la solidaria?
¡Cuesta!. Yo comparto felizmente la vida con mi pareja, una adolescente y un perro de un año y 40kg. Al final hay que ponerse un horario y dividirse entre una cosa y la otra. Ahora puedo decirte que ¡es posible ganar al parchís mientras contestas mensajes!. El tema de la conciliación no es más fácil en la «vida real», especialmente para las mujeres. Es una de las cuentas pendientes que tenemos como sociedad. Ojalá todo esto sirva para la reflexión.
¿Cómo crees que va a cambiar las relaciones sociales a partir de ahora, o todo seguirá igual?
Voy a días. A ratos. Desde un punto de vista práctico, de forma, creo que seguiremos igual, comunicándonos y relacionándonos a través de los mismos canales, y seguramente la idea del teletrabajo que en este país no se entendía, ha venido para quedarse. Desde un punto de vista emocional creo posible un cambio sobretodo de prioridades individuales. A qué y a quién dedicamos nuestro tiempo, qué necesitamos y qué nos sobra, qué vivíamos como algo importante y qué es lo realmente importante para cada [email protected] de [email protected] Si se producen cambios individuales a este nivel se traducen en cambios colectivos rápidamente. Luego tengo momentos en los que pienso que no tenemos remedio, y que todo seguirá como antes.