Palma ha sido elegida entre 50 ciudades europeas para trabajar en el proyecto europeo llamado BioDiverCities, impulsado por el Centro de Investigación de la Comisión Europea, como prueba piloto para probar cómo se ha de implementar la Estrategia Europea de Biodiversidad 2030 en los planes urbanísticos de las Ciudades, haciendo especial incidencia en la aceptación social, mediante la participación ciudadana. Precisamente, uno de los ejes del Plan General recientemente presentado consiste en «Abrir Palma al mar ya la naturaleza», es decir, tomar medidas de adaptación al cambio climático para concebir la ciudad como un ecosistema: desde la Sierra de Tramontana hasta la pradera de posidonia, pasando por torrentes y espacios naturales.
«Queremos hacer de Palma una ciudad autosuficiente y resiliente frente la emergencia climática. Por ello el Plan General da respuesta a esta problemática con medidas innovadoras, ambiciosas, pensando en el ahora y en el mañana«, ha dicho la concejala de Modelo de Ciudad, Vivienda Digna y Sostenibilidad, Neus Truyol «Estos objetivos están alineados con el agenda sostenible internacional, por eso Europa reconoce esta tarea y objetivos compartidos, ya que la Comisión Europea ha seleccionado el Plan General como proyecto piloto para implantar la Estrategia Europea de Biodiversidad en los proyectos y planes urbanísticos de las ciudades«.
En este sentido, la candidatura del Ayuntamiento aportaba dos puntos fuertes:
- La oportunidad de estar redactando el nuevo Plan General. Entre el 2015-2019 se trazó la estrategia y se inició el diálogo social con las mesas de participación de modelo de Ciudad. Ahora, en los años 2019-2023 toma forma y se materializa en la redacción del nuevo Plan.
- Las experiencias previas con el diseño y la participación de los Institutos en el proyecto del Canódromo y el Velódromo en la Cuña Verde, como primer paso para hacer un modelo de ciudad en diálogo con una ciudadanía proactiva.
¿Qué supone participar del proyecto BioDiverCities?
Aunque 40 ciudades interesaron del proyecto, sólo se escogerán 10. «La importancia de este proyecto europeo es la aportación y el acompañamiento de un experto en los procesos y sobre todo formar parte de una red internacional de ciudades que comparten objetivos, metodología y acciones en la misma dirección y, por tanto, es muy importante el apoyo de los mejores especialistas europeos y el contacto con 10 ciudades más que están llevando procesos similares«, apuntó Truyol.
En concreto, las ciudades escogidas son Leiden (Holanda, 122.000 Hab.), Palma (España 409.000 Hab.), Valongo (Área metropolitana de Oporto, Portugal 94.000 Hab.), Stavanger (Noruega 131.000 Hab.), Vilnius (capital de Lituania 544.000 Hab.), Sofía (Capital de Bulgaria 1.243.000 Hab.), Maribor (Eslovenia, 94.000 Hab.), Novi Sad (Serbia, 289.000 Hab.), Palermo (Capital de Sicilia, Italia 673.000 Hab.) y Regalbuto (Sicilia, Italia 7.233 Hab.). También Oslo (Capital de Noruega, 681.000 Hab.), Varese (Lombardía, Italia 81.000 Hab.) y Lisboa (Capital de Portugal, 505.000 Hab.) Son ciudades observadoras del proyecto, que participarán sin tener la ayuda del experto por tanto con recursos propios.
Este es el enlace al mapa de las ciudades: https://oppla.eu/these-biodivercities-will-jointly-work-citizens-improve-urban-nature
El proyecto permite que se presenten experiencias de otras ciudades europeas que han implementado soluciones basadas en la naturaleza y en los servicios ecosistémicos en el desarrollo de sus áreas verdes, a fin de reducir los efectos de la isla de calor y adaptarse a los efectos del cambio climático desde el planeamiento urbanístico. En este sentido, Lisboa ha compartido su estrategia para la biodiversidad urbana, poniendo de relieve como la mejora de la infraestructura verde (conectando los espacios verdes urbanos) y la infraestructura azul (cerrar el ciclo del agua, regenerar los torrentes y renaturalizar la costa), contribuyen a la mejora de la salud y la calidad de vida de los habitantes. Esto se concreta en la creación de mapas interactivos para visualizar qué parques y jardines son los más utilizados y en qué horas del día, y cuáles desplazamientos hace la ciudadanía para llegar. Los parques donde la ciudadanía tiene que hacer un desplazamiento más largo para llegar se consideran que ofrecen más calidad.
¿En qué consiste el proyecto?
El objetivo es que este acompañamiento especializado para construir el engranaje necesario entre administración y el resto de actores (centros educativos, asociaciones, vecinos) permita conformar espacios ricos en biodiversidad con funciones sociales y ecosistémicas. Al mismo tiempo que permita mejorar las estrategias de participación y colaboración para explicar la ciudad sostenible del futuro los ciudadanos y cocrear con ellos, con el objetivo de generar el necesario cambio de hábitos que permita transitar de la dependencia fósil a maneras de vivir más sostenibles.
El proyecto consiste en financiar con 20 mil euros durante dos años el apoyo técnico de un experto para el diseño e implementa.