La presidenta del Govern, Francina Armengol; el conseller de Movilidad y Vivienda, Josep Marí, y el alcalde de Sant Josep de sa Talaia, Ángel Luis Guerrero, han presentado esta mañana el proyecto de construcción de un vial para peatones y para bicicletas que unirá el núcleo de Sant Jordi con Platja d’en Bossa mediante una pasarela elevada sobre la autovía del aeropuerto.
Se trata de uno de los principales proyectos que impulsa el Govern de les Illes Balears en la isla de Ibiza en 2023 a través del Fondo de Impulso del Turismo Sostenible (ITS), que financiará íntegramente esta nueva infraestructura con un presupuesto de 1,5 millones de euros. Tanto el Govern como el Ayuntamiento dan respuesta a la petición de los vecinos del municipio de reconectar y recuperar las tradicionales comunicaciones entre el núcleo de Sant Jordi y su barriada marítima, Platja d’en Bossa, sin necesidad de utilizar el vehículo, cortadas desde la construcción de la autovía del aeropuerto.
La presidenta del Govern ha explicado que «es de justicia juntar aquello que se separó y hacerlo también con un paseo ciclista como el que se plantea en el proyecto». Francina Armengol ha destacado «la carga que tiene recuperar Can Pere Casetes como símbolo de lo que significa luchar por el pueblo» y ha recordado la importancia del impuesto de turismo sostenible, que financia este proyecto, para «hacer unas islas, y el municipio de Sant Josep, más sostenibles».
El conseller Marí, por su parte, ha afirmado que con este proyecto se podrá «coser la herida que significaban las autovías» con «un proyecto que pone de relieve la importancia del pueblo de Sant Jordi y que de una forma amable y más humana reconectará las dos zonas», a la vez que «ponemos en valor una equipación, como es Can Pere Casetes, que ahora mismo no tiene un uso».
El alcalde de Sant Josep, por su parte, ha agradecido «la sensibilidad del Govern para atender una deuda pendiente con Sant Jordi desde la construcción de las autopistas, como es reconectar el pueblo con el mar, tal como se prometió a los vecinos y vecinas». También ha destacado la importancia que tendrá Can Pere Casetes para «empezar a solucionar el déficit de instalaciones culturales y cívicas que tiene Sant Jordi, y todavía mejor si lo hacemos recuperando para todos los jordiers un lugar tan simbólico como esta casa», ha dicho Guerrero.
Este nuevo vial, dedicado exclusivamente a peatones y bicicletas, recorrerá un tramo de 1.100 metros, aproximadamente: empezará al final de la calle del Avisador, pasará junto a Can Pere Casetes y, mediante una pasarela metálica, permitirá cruzar la autovía pasando por la balsa de laminado hasta llegar a la calle de la Gamba Roja para llegar a Platja d’en Bossa.
El trazado permite un paseo en el entorno de la balsa de laminado que facilitará observar las zanjas de cultivo de época romana localizadas en la zona durante la construcción. El proyecto incorpora una zona de descanso donde se instalará un panel explicativo de estos hallazgos para poner en valor el espacio que ocupan.
Según el anteproyecto redactado por el Departamento de Obras Públicas de la Dirección General de Movilidad y Transporte Terrestre, el presupuesto base de licitación es de 1.487.038 €, al cual se suma el 1 % cultural. Por lo tanto, el presupuesto del nuevo vial se sitúa en 1.501.909 €, que se financiarán a cargo de ITS.
Cesión de Can Pere Casetes
Para salir adelante el proyecto, el primer paso será la firma de un convenio entre el Govern y el Ayuntamiento de Sant Josep en el cual se incluirá el compromiso de la Comunidad Autónoma de financiar y construir el itinerario para peatones, mientras que el Ayuntamiento asumirá la conservación y el mantenimiento en las condiciones adecuadas del nuevo recorrido.
Otro punto destacado del acuerdo entre las dos instituciones es la cesión al Ayuntamiento de Sant Josep de la antigua casa de Can Pere Casetes para rehabilitarla y usarla posteriormente como centro sociocultural en la zona de Sant Jordi. Esta construcción tiene un considerable valor simbólico y patrimonial por su tipología —una vivienda rural tradicional de grandes dimensiones— que quedó deshabitado a raíz de las expropiaciones hechas para construir la autovía de acceso al aeropuerto de Ibiza. A través de esta cesión, el Ayuntamiento ve la oportunidad de recuperar esta edificación en desuso para dar solución a la carencia de espacios comunitarios en esta población.
Una vez firmado el convenio, el Govern licitará el proyecto de construcción del nuevo vial. Las obras, que tienen un plazo de ejecución de 6 meses, se llevarán a cabo este 2023.
Al acto de presentación del proyecto han asistido el director general de Movilidad y Transporte Terrestre, Jaume Mateu, y el jefe del Departamento de Obras Públicas del Gobierno, Joan Mas.