Ya han concluido las obras del nuevo almacén ferroviario que se ha construido en la estación del Enllaç. Se trata de un nuevo equipamiento que se utilizará como almacén de recambios para el mantenimiento de las instalaciones de electrificación.
A consecuencia de la puesta en servicio en 2019 de las nuevas instalaciones asociadas a la electrificación, que supone casi haber duplicado el número de las mismas, ha sido necesario aumentar el nivel de los stocks de materiales de repuesto, especialmente aquellos necesarios para hacer frente a posibles incidencias.
Hasta hoy, estos materiales se almacenan mayoritariamente en las dependencias de la empresa en Son Rutlan y, en menor medida, en otras ubicaciones. Dada la reforma que se llevará a cabo de los talleres de SFM para adaptarlos a las necesidades y a los nuevos trenes que se han adquirido, se decidió la construcción de este nuevo almacén, para poder trasladar los materiales que ya no tendrán cabida en las instalaciones de Son Rutlan y, de paso, aumentar esta capacidad de almacenaje.
El nuevo almacén dispone de características especialmente diseñadas para la función a la que se quiere destinar. Se trata de una nave con dimensiones especialmente pensadas para poder introducir y organizar los materiales de electrificación, con una única puerta y sin aperturas a nivel de calle que, junto con las cámaras y control de accesos, permitirán poder gestionar y custodiar correcta y eficientemente estos recambios.
La ubicación en la estación del Enllaç es óptima desde el punto de vista de mantenimiento por el emplazamiento en medio de la red ferroviaria, lo que hace que en caso de necesidad se minimicen los tiempos para acceder a los materiales de mantenimiento y también por la accesibilidad a la nueva dotación tanto por vía como por carretera.
En la misma actuación, SFM ha aprovechado para restaurar dos estructuras que se construyeron al mismo tiempo que el resto de edificios de la estación del Enllaç, en 1878, siguiendo el proyecto diseñado por Eusebi Estada. Se trata de una giratoria y un fossat de picar foc, que son las únicas que se conservan en toda la red ferroviaria de Servicios Ferroviarios de Mallorca. El foso era el lugar donde se lanzaban las cenizas y escorias de las locomotoras. Por su parte, las giratorias servían para cambiar la dirección del tren y solían encontrarse en las estaciones terminales, eran espacios circulares donde se colocaba la placa giratoria que era la que permitía cambiar la dirección del tren. Tras la retirada de la vegetación, se ha realizado una limpieza completa de las estructuras, especialmente del interior, consolidándose aquellas partes más malogradas, para lo que se han empleado los mismos materiales constructivos que se han colocado con la misma técnica.
Hay que destacar que también se han instalado tres paneles divulgativos que recogen información sobre la historia de la estación del Enllaç y sobre estas piezas únicas en el patrimonio ferroviario de Mallorca.
La actuación está incluida entre las previstas en el vigente Plan Director Sectorial de Movilidad de las Illes Balears.
La obra se adjudicó en su momento a la empresa Obras y Pavimentaciones MAN, S.A.O., por un importe de 516.446,29 € (IVA excluido) y ha tenido un plazo de ejecución de cinco meses.